CESAR PEREZ GELLIDA
Editorial Suma 588 páginas
Noviembre 2020
Me vuelvo a deleitar con este autor y no dudo en volver a definirme como fiel Gellidista. A quien le vaya el género negro, las lecturas adictivas, las tramas enrevesadas, violencia y sangre por partes iguales, policías y mafias, y unos personajes que dejan poso no dudéis en probar con este autor.
En esta ocasión nos lleva a su Valladolid comenzando la novela con la muerte salvaje de una mujer entrada en años en su propio hogar y con el robo de una pieza de gran valor artístico del museo nacional de escultura de la propia capital castellanoleonesa. Dicho robo está dirigido por un personaje ante todo peculiar físicamente y con un gran “cv”a sus espaldas, al que llaman “El espantapájaros” y enmoquete le acompañan un pocero, un minero y un sicario libanés.
El equipo policial dirigido por Sara Robles, adicta a su trabajo y al sexo por partes iguales se verá inmerso en ambas tesituras centrándose en mayor medida en el robo perpetrado en el museo, el cual pudiera parecer “el robo perfecto” y todo lo que de ello se deriva, investigación policial llevada al límite , mafias, luchas de poder, muertes, ejecuciones, venganza... en esa resolución del caso deriva la trama de la novela. Como la propia Sara reconoce durante toda la novela no se despega de esa sensación que da título a la obra, que no es otra que la suerte del enano, que fue a cagar y se cagó en la mano, digamos que la tiene muy presente.
Siendo una novela de casi 600 páginas el ritmo es frenético, la sensación de hacerte sospechar cuando ves que das un paso adelante en la trama, la sucesión constante de secuencias inesperadas, los personajes secundarios que van surgiendo y el proceso vital de la propia protagonista inmersa en su doble adición y sus problemas no resueltos del pasado, todo ello con el trasfondo del complejo mundo de los robos de obras de arte y las mafias a nivel internacional acechando.
Todo ello enlatado en la ciudad de Valladolid, la cual se mantiene muy presente durante casi toda la trama lo cual lo hace más real, mencionado parques, calles o bares sin obviar el lado gastronómico de la urbe. Se convierte en un personaje más.
También me han gustado los guiños a otras de sus novelas, de las que aparecen algunos personajes con una conexión que invita a que no caerán en el olvido ( Todo lo peor y Todo lo mejor) y según he leído en otros blogs, en esta historia muchos de los protagonistas y escenarios aparecen en otras de sus obras que no tardaré en devorar.
No quiero olvidarme de su cameo en esta novela, de ese humor negro sobre la muerte tan presente y ese estilo tan real a la hora de describir a sus personajes.
Sin duda una gran novela policial, un thriller con todas las letras, que se puede leer en varias sentadas ya que te atrapa de manera sibilina desde el comienzo.
Nota: 9
Gracias por la reseña, la verdad que es una de las novelas más adictivas y que más risas me ha producido de los últimos tiempos.
ResponderEliminarSaludos
Estoy de acuerdo, adictiva a la par que divertida. Gracias a ti por comentar, saludos
EliminarYO también soy gellidista total y con esta novela disfruté como una enana
ResponderEliminarBesos
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarEs un estilo único. He disfrutado mucho con cada una de sus novelas. En mi lista de pendientes están las dos trilogías
EliminarBesos